¿Qué es la displasia y por qué afecta al Cane Corso?

La displasia es una malformación en la articulación, generalmente en cadera o codo que provoca una unión incorrecta entre los huesos. En la cadera, la cabeza del fémur no encaja adecuadamente en el acetábulo. En el codo, las estructuras articulares no se alinean de forma correcta. Con el tiempo, este desajuste genera dolor, inflamación y desgaste progresivo del cartílago.

El Cane Corso, debido a su tamaño, crecimiento rápido y peso considerable, es más propenso a sufrir estas alteraciones si no se establecen cuidados apropiados desde la etapa de cachorro.

Displasia en Cachorros de Cane Corso

Desarrollo acelerado y riesgo de malformaciones
Los cachorros de Cane Corso crecen con gran rapidez durante sus primeros meses. Los huesos, músculos y articulaciones aún están en formación, por lo que son especialmente vulnerables a lesiones o alteraciones morfológicas. Una mala nutrición, ejercicios inadecuados o predisposición genética pueden influir en la aparición temprana de displasia.

Señales tempranas en los primeros meses
En etapas iniciales, las señales suelen ser sutiles. Entre las más frecuentes se encuentran

• Cojera intermitente después del juego.
• Dificultad para levantarse.
• Movimientos rígidos o torpes.
• Preferencia por evitar escaleras o saltos.
• Cambios en la forma de caminar, como balanceo de la cadera.

Aunque algunos síntomas pueden confundirse con el crecimiento normal, es importante prestar atención a cualquier variación persistente.

Factores que influyen en la aparición de displasia en cachorros

Genética
La heredabilidad es uno de los factores más determinantes. Criadores responsables realizan pruebas y seleccionan ejemplares libres de displasia para reducir la incidencia.

Conoce a nuestros ejemplares de Cane Corso y sus Pedigrees

Nutrición inadecuada
Un exceso de calorías, dietas muy cargadas de calcio o un crecimiento demasiado acelerado contribuyen al desarrollo incorrecto de las articulaciones.

Ejercicio inapropiado
Saltos, carreras intensas o superficies resbaladizas pueden provocar tensiones excesivas. Durante el crecimiento, los ejercicios deben ser moderados y controlados.

Displasia en Perros Cane Corso Adultos

Cómo evoluciona la displasia con el paso del tiempo
En muchos casos, los perros que desarrollan displasia desde pequeños comienzan a mostrar signos más evidentes en la edad adulta. La articulación afectada se desgasta progresivamente, generando artrosis, pérdida de movilidad y mayor dolor.
Incluso perros que no presentaron síntomas de cachorros pueden manifestarlos más adelante, especialmente si la displasia era leve o pasó desapercibida.

Síntomas más comunes en adultos

• Cojera persistente, especialmente después del ejercicio.
• Reducción notable de actividad o deseo de caminar.
• Dolor al tocar la articulación.
• Dificultad al levantarse tras periodos de descanso.
• Rigidez marcada en climas fríos.
• Pérdida de masa muscular en las patas posteriores.

Calidad de vida

Muchos ejemplares adultos pueden llevar una vida activa si se aplican cuidados adecuados. La combinación de control del peso, ejercicio equilibrado y ajustes en su entorno ayuda a disminuir la carga sobre sus articulaciones.

Prevención y Cuidados Recomendados

Selección responsable del criador
Elegir un cachorro cuyos padres hayan sido evaluados reduce significativamente el riesgo de que desarrolle displasia.

El Estándar de la Raza Cane Corso, la Excelencia según la Federación Cinológica Internacional (FCI)

Alimentación equilibrada
Una dieta adecuada para razas grandes, sin excesos calóricos, ayuda a que el crecimiento sea más uniforme y reduce el riesgo de sobrecarga articular.

Alimentación BARF casera para tu Cane Corso. Nutrición natural y equilibrada

Ejercicio moderado
Actividades controladas como paseos regulares y ejercicios de bajo impacto fortalecen los músculos sin dañar las articulaciones.

Control del peso
Mantener un peso saludable evita presión innecesaria sobre las caderas y codos, tanto en cachorros como en adultos.

Resumiendo, la displasia en el Cane Corso es algo que puede llegar a ser una preocupación, pero con información adecuada y cuidados preventivos es posible minimizar su impacto. Observar los primeros signos en cachorros, mantener hábitos de vida saludables y comprender la evolución de esta condición en la edad adulta permite ofrecer a estos perros la oportunidad de vivir cómodos, activos y plenos.

Contacta con nosotros y te asesoraremos en todo lo que necesites acerca del Cane Corso